No estamos solo al principio del negocio. Ayudamos al cliente a desarrollarlo y expandirlo. Estamos presentes en su día a día y lo asesoramos en las cuestiones más diversas de tipo laboral, fiscal o medioambiental. Si fuera necesario, DNM es apta para litigar en cualquier tribunal, en defensa de sus intereses.
Los negocios se constituyen con el objetivo de crear riqueza. Ayudamos en la creación de esa riqueza y prestamos el asesoramiento necesario en el cobro de los créditos de nuestros clientes.
Ayudamos a los clientes a que encuentren el mejor instrumento jurídico para desarrollar y distribuir sus productos y servicios. Negociamos y redactamos los tipos de contratos más diversos, como los contratos de distribución, franquicia, representación y agencia, y aquellos en los que el desarrollo del negocio pasa por la constitución de colaboraciones con terceros, como los de joint venture, las agrupaciones complementarias de empresas, los consorcios, y otras formas de participación conjunta en negocios.
DNM asesora y orienta a sus clientes cuando su estrategia de expansión implica la escisión o fusión con otras empresas, formando equipos multidisciplinarios que garantizan que la adquisición o transmisión del negocio se produzca sin ninguna sorpresa o sobresalto.
Protegemos lo invisible. La propiedad intelectual es el activo más valioso en cierto tipo de negocios. Ayudamos a nuestros clientes a registrar sus marcas, diseños, patentes, modelos; velamos por la protección de sus derechos de autor; buscamos la mejor protección para el desarrollo del software y de las tecnologías de la información.
Un negocio está hecho de personas. Y a pesar de tener una naturaleza eminentemente social, el ser humano, por los motivos más diversos, no siempre logra convivir pacíficamente con sus semejantes. DNM ayuda a mediar, conciliar, arbitrar y litigar en cualquier conflicto que surja en el seno del negocio.