DNM se constituyó en noviembre de 2002, con oficina en Pombal, pero su origen se remonta a los inicios de la década de los noventa, cuando Mário Diogo y Paulo Neto decidieron trabajar en conjunto. En un municipio en franca expansión de su tejido empresarial, estos dos amigos y socios se centraron fundamentalmente en la atención al cliente empresarial y a la inversión extranjera directa en esta parte del territorio portugués. Con un aumento sustentado en su actividad profesional, a finales de la década de los noventa, Jorge Marques fue invitado a formar parte de la oficina como socio.

Cuando sus clientes empresariales empezaron a expandir su actividad mercantil a España, la Unión Europea y otras regiones del mundo, estos comenzaron a solicitar a DNM asistencia jurídica en la expansión de sus negocios, lo que implicaba tener conocimiento del derecho interno de los países en los que querían operar. De esta forma, en 2005 pasamos a formar parte de AEA - International Lawyers Network, que está compuesta por cientos de oficinas independientes de un tamaño similar a la nuestra, ubicadas en diversas partes del mundo, lo que nos permitió, por lo tanto, acompañar y asesorar a nuestros clientes en cualquier parte del mundo.

Tras un acercamiento en las relaciones entre las oficinas que constituían la AEA, DNM rápidamente empezó a ayudar a los clientes de otras oficinas AEA que buscaban invertir y expandir su actividad en el mercado portugués, lo que llevó a la apertura de oficinas en Lisboa, para acompañar de forma más próxima a esos clientes.

Es natural que, en una asociación formada por cientos de despachos, y fruto de las relaciones profesionales que se establecen, se creen vínculos más fuertes con determinados despachos. Es en este entorno que nace Justinian Lawyers.